Una buena planificación es una de las claves básicas para que todo trabajo sea fluido y estructurado y, por tanto, para que cualquier proyecto se pueda completar con eficacia.
Los alumnos necesitan en este punto la ayuda del docente, quien habrá de encargarse de:
- Controlar que se están cumpliendo los tiempos marcados y las expectativas de aprendizaje. Debe hacerse sin fiscalizar el progreso.
- Tutorizar a los alumnos de forma individual para comprobar que se sienten seguros (que disponen de los recursos necesarios, por ejemplo).
- Mediar en caso de conflicto en el seno de cualquier grupo (siempre que sus miembros no sean capaces de resolverlo por sí mismos) para conseguir crear un ambiente de armonía y que el proyecto llegue a buen término.
Para ayudar a los alumnos a planificar de manera correcta, te proponemos utilizar esta plantilla de planificación. Te resultará útil, pues cuentas con las indicaciones necesarias para completar las distintas fases de la planificación del proyecto.
Asimismo, a la hora de realizar una buena planificación, debes tener en cuenta los siguientes aspectos:
- Definir los plazos de entrega y de finalización del proyecto. Existen distintos recursos para poder ayudarnos en esta tarea, aunque uno de ellos es el conocido diagrama de Gantt. Se trata de una herramienta sencilla que facilita tanto la organización de las distintas tareas como su temporización. Para crear dicho diagrama, puedes utilizar la plantilla de planificación que te proporcionamos o también usar plantillas descargables de PowerPoint como "Plan de Trabajo" o "Flecha". Si se desea realizar algo un poco más complejo, se recomienda Timeline Office.
- Solicitar a cada equipo la presentación de un plan de trabajo donde se especifiquen las tareas previstas, los responsables de cada una y el calendario para realizarlas. Al crear un plan de trabajo, los alumnos pueden organizar tanto el reparto de tareas como los plazos para completarlas. Por otro lado, también pueden pautar los pasos que seguirán en el proceso de su trabajo. Por ejemplo:
- Modo de trabajo.
- Revisión de conocimientos previos.
- Planteamiento de preguntas acerca del tema.
- Identificación de los puntos clave que se quieren desarrollar.
- Delimitación del campo a tratar y de los aspectos concretos.
- Búsqueda y selección de información sobre el tema.
- Puesta en común de la información obtenida y extracción de conclusiones.
Recuerda que cuentas con la plantilla de planificación para ayudar a tus alumnos a gestionar esta fase del proyecto.
- Hacer un seguimiento de los plazos estimados para cada tarea. A través de un cronograma de actividades compartido entre alumnos y docente, se puede realizar un buen seguimiento tanto del proceso como del cumplimiento de plazos por parte de aquellos. Además de las herramientas antes mencionadas, se pueden utilizar otras herramientas online para compartir dicha información:
- Microsoft Project. Programa muy completo e intuitivo para secuenciar las tareas a realizar y los plazos de entrega.
- TimeRime. Recurso útil para crear un calendario, establecer plazos y hacer un seguimiento en tiempo real del mismo gracias a que puede compartirse en línea.
- Asegurar que se respeta el plan de trabajo y se realiza la presentación final. Los alumnos tienen que entender la importancia de su responsabilidad individual a la hora de presentar sus tareas de forma eficiente y en el tiempo previsto. Por eso, la cohesión y los acuerdos de grupo serán fundamentales para el buen desarrollo del reto. Un modo de lograrlo es redactar al comienzo del reto unos compromisos que todos los alumnos acuerden cumplir. Por ejemplo:
- Mantener una actitud proactiva hacia los objetivos del reto.
- Participar en las tareas previstas.
- Respetar y escuchar todas las opiniones.
- Cumplir con las tareas y plazos asignados.
- Comunicar las incidencias que puedan surgir con tiempo suficiente para buscar una solución.
Encontrarás estos compromisos en el siguiente enlace (puedes recoger los que marcados en el grupo clase para vuestro proyecto específico).