Las unidades didácticas de la asignatura están definidas a partir de la secuenciación de los contenidos y bloques temáticos establecidos en el currículo por la Conferencia Episcopal Española. Los objetivos de aprendizaje planteados deben servir para que los alumnos aprendan a reconocer la importancia del hecho religioso en la historia de la humanidad, la alianza de Dios con su pueblo, la figura de Jesucristo y la presencia de la Iglesia en el mundo.
El enfoque pedagógico de la asignatura está dirigido a promover en los alumnos el conocimiento progresivo a partir de una serie de propuestas didácticas con las que se pretenden los objetivos siguientes:
- Identificar la relación de Dios con el ser humano e interpretar su significado.
- Explicar el significado histórico de la Biblia.
- Distinguir y recordar los libros que forman el Viejo y el Nuevo Testamento.
- Comprender e interpretar la vida de Jesucristo en la Tierra.
- Conocer y respetar la importancia y la estructura de la Iglesia.
Se trata, por lo tanto, de que las competencias adquiridas conduzcan al alumnado a comprender el significado de la religión a través del desarrollo creciente y progresivo de los conocimientos específicos establecidos en los bloques temáticos dedicados al sentido religioso del ser humano, la revelación de Dios, la vida y la resurrección de Jesús y la permanencia de la Iglesia como representante de Dios en la Tierra.
La estructura modular de las unidades didácticas permite abordar los distintos procesos cognitivos en base a la taxonomía de Bloom y sus posteriores revisiones. Para ello, se cuenta con una propuesta secuenciada de actividades didácticas planteadas para abordar los contenidos de la materia.
Mediante el avance progresivo de las diferentes secuencias didácticas se procede a profundizar y desarrollar los conceptos de forma creciente, de modo que los alumnos construyan su conocimiento a lo largo de toda esta etapa de aprendizaje. Las actividades propuestas pretenden aproximar los contenidos a través de planteamientos sencillos que poco a poco adquieren mayor complejidad con el fin de que el alumno tome conciencia de su propia religiosidad.
La secuenciación también incluye actividades destinadas a la valoración de la religión, a fomentar el conocimiento de la comunidad cristiana, a interpretar y valorar la palabra de Dios y a relacionar el significado de la religión con su propia vida con el fin de incorporarla a su desarrollo y crecimiento.
- Ejercicios individuales dedicados a analizar la importancia del bien a lo largo de la historia de la humanidad.
- Lectura, descripción y comprensión de los diferentes libros que forman parte de la Biblia.
- Actividades colectivas centradas en la interpretación de la vida de Jesús o en diferentes hechos narrados en el Nuevo Testamento.
La amplitud y variedad de recursos incluidos en las tecnologías de información y comunicación y la posibilidad de realizar un seguimiento individualizado de los alumnos permiten adaptar de modo flexible las propuestas didácticas para atender del mejor modo posible la diversidad del aula y aplicar las metodologías que mejor se ajusten a cada situación.
Para saber más sobre la propuesta de aulaPlaneta para el área de Religión, consulta el documento Activa Religión. El camino para vivir el hecho religioso de manera activa.